Autoridad y Poder
Autoridad es un concepto vinculado con la idea de poder, por lo que siempre hay que tener presente que ambos poseen un común denominador, aunque su origen y finalidad sean disࢢntos.
El Amo en busca de sentido tiene autoridad antes que poder.
La autoridad es una cualidad de aquel Amo que es capaz de inspirar y guiar a un esclavo. El poder, en cambio, es la probabilidad de tomar decisiones que afectan a la vida del esclavo. Es decir, el poder es la capacidad de imponer a un esclavo la propia voluntad.
No todo Amo que se considere una autoridad necesariamente lo es, por lo que tal concepto sólo debe utilizarse cuando los Amos a quienes se aplica se hayan ganado dicho título o derecho.
Toda autoridad dentro del bdsm es una autoridad moral, y como tal goza siempre de poder; sin embargo, tener poder en el bdsm, o ejercerlo, no significa necesariamente poseer verdadera autoridad. Por ejemplo, un falso Amo podría usar el poder que le otorga su esclavo para realizar prácticas que atenten contra la integridad fisica del sumiso (como el sexo sin protección) En este sentido el uso del poder puede encubrir debilidades de aquel que quiere sentir lo que es imponer su dominio pero que desconoce todavía lo que significa ser Amo.
En el bdsm no existen imposiciones ya que cualquier actividad que no se realice desde la propia libertad individual de ambas partes (a través de la seguridad, la responsabilidad y el mutuo acuerdo) no es bdsm.
La autoridad en el bdsm siempre es una autoridad moral que se gana y se construye de manera ética.
Ser Amo con sentido ético
Ser Amo con sentido ético significa serlo y no parecerlo. La ética, como la actitud, no es visible a los ojos. Un Amo así tiene una vida equilibrada, irradia energía positiva y es respetado por la gente que le rodea.
Ser Amo con sentido ético significa ser creativo, innovador, paciente y tener visión de futuro. El camino hacia la esclavitud es un proceso largo y lento que no se consigue en unas pocas sesiones.
Ser Amo con sentido ético significa motivar al esclavo respetando su libertad individual. Es importante decir otra vez que la libertad individual del esclavo es intocable. Ejercer el poder para controlar esa libertad no es bdsm. El esclavo solo puede entregar su voluntad de forma consciente y plena si el Amo respeta su libertad individual.
Ser Amo con sentido ético significa generar, a través de la humillación y la disciplina, riqueza y valor para la formación del esclavo. Eso implica creer en él y ser solidario y sensible con su proceso de crecimiento.
Ser Amo con sentido ético significa tener vocación de servicio. El Amo debe saber orientar y facilitar el cumplimiento de las metas propuestas a su esclavo, por duras que éstas sean. Y esto solo se consigue desde la voluntad de querer ayudarle. Solo el Amo puede guiar al esclavo para que éste llegue a ser lo que realmente desea ser. Y un esclavo solo desea satisfacer a su Propietario.
Ser Amo con sentido ético implica la aceptación mutua y comprometida de una meta común: la perfección del esclavo. Este camino es de doble sentido, ya que a este objetivo solo se llega a través de la consiguiente perfección del Amo. Cada esclavo es único y singular para cada Amo y cada Amo es único y singular para cada esclavo.
Ser Amo con sentido ético significa aprender continuamente y con humildad de todo lo que un esclavo, desde su posición inferior, pueda enseñarle. Tanto el Amo como el esclavo se perfeccionan mutuamente.
Solo un esclavo con sentido ético puede entregar de forma libre y consciente la voluntad a su Amo. Un esclavo no puede renunciar a la ligera, y por un mero impulso sexual, a la libertad individual que le confiere ser un hombre libre que goza de derechos socialmente adquiridos. Y desde esa misma libertad el esclavo elige la sumisión, el sacrificio y la entrega, incluso la animalización, como una vía de experimentación y desarrollo.
El Amo con sentido ético busca la felicidad del esclavo. Y tanto para el Amo como para el esclavo la felicidad es consciencia de evolución.
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